Un problema de enfriamiento del motor en el nuevo cohete gigante de la NASA para la exploración del espacio profundo obligó a la agencia a cancelar el muy esperado lanzamiento del propulsor, programado para el 29 de agosto a las 07:33 horas (UTC -05:00 Bogotá, Lima, Quito).
Créditos:NASA/Cory Huston
El control de misión detuvo el conteo a falta de 40 minutos del lanzamiento, al detectarse una serie de fallas en el Motor N° 3, incluyendo una fuga de hidrógeno líquido durante el proceso de abastecimiento de combustible. Asimismo, se adviritió una posible grieta en una parte del refuerzo central conocida como “brida entre tanques”, que conecta los tanques gigantes de hidrógeno y oxígeno líquido del SLS. Los tanques pueden contener un total combinado 3,3 millones de litros de propulsor.
Por suerte, el cohete SLS y la nave espacial Orion permanecen en una configuración segura y estable.
La NASA podría intentar intentar lanzarlo nuevamente el viernes 2 de septiembre o el 5 de septiembre, si las condiciones climáticas lo permiten.
Fuente: Space.com
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